En Panamá, hay empresarios que construyen, innovan, exportan… y luego están los que alquilan al Estado. Literalmente.
El caso de Eduardo Gateno y Pacific Developers es un retrato perfecto de cómo un grupo selecto de “empresarios” ha encontrado la fórmula mágica para hacerse millonarios sin competir, sin arriesgar, sin innovar. ¿La receta? Construir un edificio y sentarse a esperar que el Estado —es decir, nosotros, los contribuyentes— les pague millones por arrendarlo durante décadas.
El más reciente contrato es escandaloso: más de 3 millones de dólares para alquilarle oficinas al Ministerio de Gobierno, en un edificio de lujo ubicado en Condado del Rey. ¿El propietario? Sí, Pacific Developers, la empresa ligada directamente a la familia Gateno.
¿Y la licitación? Brilla por su ausencia. ¿El estudio de ubicación, impacto, costo-beneficio? No existe. ¿La justificación para no construir una sede pública propia? Tampoco.
Este modelo de negocio —porque eso es lo que es— ha permitido que seis familias panameñas se enriquezcan durante más de 30 años alquilándole al Estado edificios a precios inflados, amarrando contratos blindados, con cláusulas que incluso incluyen cobros por mantenimiento, estacionamientos, “derecho a luz solar” y otros absurdos disfrazados de legalidad.
El pueblo paga doble: con sus impuestos, y con la incomodidad de tener que pagar parqueo o caminar largas distancias para hacer un simple trámite. Todo, mientras el Estado sigue hipotecando su futuro y engordando los bolsillos de quienes ven al erario como una cuenta de ahorros privada.
Lo más doloroso es que esto no es ilegal, pero sí profundamente inmoral.
¿Por qué no construir una Ciudad Gubernamental moderna, eficiente y autosostenible? ¿Por qué no auditar todos los contratos de arrendamiento vigentes? ¿Por qué seguir premiando a quienes no producen riqueza real, sino que viven del Estado como parásitos bien vestidos?
Es momento de hacer visibles a quienes operan bajo la sombra del silencio y la complicidad.
Eduardo Gateno, Pacific Developers y el resto del clan que vive del alquiler público deben responder ante la opinión pública. No por lo legal, sino por lo ético. Porque en un país donde no hay camas en los hospitales, ni pupitres en las escuelas, es un insulto seguir pagando millones por oficinas de lujo.
Alquilarle al Estado no te convierte en empresario. Te convierte en parte de un sistema que sangra a Panamá desde adentro.
Desde PNN – Panamá Noticias Network, no solo señalamos. Vamos a documentar, investigar y exhibir. Porque este país no aguanta más contratos tóxicos. Y porque los verdaderos empresarios no se enriquecen alquilando el país. Lo construyen.
2 comments
Pingback: Pacific Developers Y El Negocio De Alquilarle Al Estado | Panamá Noticias Network
Pingback: INVESTIGACIÓN ESPECIAL PNN: Eduardo Gateno No Solo Alquila Al Estado... ¡también Explota Sus Tierras! | Panamá Noticias Network