Panamá Noticias Network Panamá Noticias Network, Tu Portal con las Mejores Noticias de Panamá y el Mundo.
Related Articles
En medio del escenario político más fragmentado de los últimos años, una figura emerge desde la oposición con fuerza renovada y voz propia: el Doctor Crispiano Adames. Combativo, coherente y profundamente Torrijista, Adames ha demostrado ser mucho más que un parlamentario: es un líder que no teme enfrentar al sistema, ni siquiera al de su propio partido.
Tras una valiente aspiración presidencial en la primaria del 2023, donde fue derrotado por Gaby Carrizo en una contienda interna marcada por el poder del aparato oficialista, Adames no se doblegó. Observó cómo el candidato oficial del PRD —el mismo que lo venció— llevó al partido a su peor resultado electoral en toda su historia en mayo de 2024. Y mientras otros bajaron la cabeza, él levantó la voz.
Crispiano Adames volvió a ganar su curul como diputado enfrentando, sin miedo ni concesiones, al establishment del PRD. No lo hizo con clientelismo ni promesas vacías, sino con la fuerza de su palabra y la fidelidad a los principios del Torrijismo: justicia social, soberanía, y compromiso con los más vulnerables.
Hoy, desde su curul, es uno de los pocos —si no el único— que se atreve a confrontar con argumentos al nuevo gobierno y al mismo tiempo, exigir una profunda autocrítica dentro de las filas del PRD. Porque mientras muchos prefieren callar o negociar, Adames insiste en lo que llama “una refundación ética y popular del partido”. Su voz retumba no solo en el hemiciclo, sino también en los barrios, en las bases desencantadas, y en los cuadros históricos que aún creen en el legado de Omar Torrijos.
La pregunta, entonces, no es solo política, sino casi clínica: ¿tendrá el Doctor Adames la medicina que reviva al PRD?
¿Podrá este médico de profesión —y luchador por vocación— reanimar a un partido enfermo de ambición, olvidado de su esencia y desconectado de su pueblo?
El tiempo lo dirá. Pero lo cierto es que, si hay alguien que ha demostrado tener el pulso firme, el diagnóstico claro y el coraje de aplicar la cura, es él.
Y quizás, solo quizás, aún haya esperanza para el PRD… si escucha al Doctor.
