El director de la Caja de Seguro Social (CSS), Dino Mon, ha encendido las alarmas sobre la necesidad de acciones urgentes para evitar una crisis en 2025 que afectaría a miles de jubilados. En este contexto, las mesas de diálogo convocadas por el presidente José Raúl Mulino se han convertido en una plataforma crucial para buscar soluciones que aborden los problemas del programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) y las prestaciones médicas de la CSS.
Un espacio de escucha y análisis
Mon ha resaltado la importancia de estas mesas de trabajo, cuyo objetivo no es solo el debate, sino escuchar las propuestas de diversos sectores. “Es necesario explicar cada una de las propuestas, ya que lo que está en papel puede interpretarse de distintas maneras”, señaló el director de la CSS. De esta forma, se garantiza un análisis técnico que permita considerar cada idea con profundidad antes de diseñar un proyecto de ley que será llevado a la Asamblea Nacional.
El presidente Mulino ha hecho un llamado a la calma, instando a los participantes a escuchar y comprender todas las ideas planteadas. Mon enfatizó que este es un proceso para escuchar soluciones, no para generar enfrentamientos.
Un proceso transparente
La dinámica de las mesas de trabajo busca garantizar la inclusión de todas las propuestas. Según Mon, se creará un documento comparativo que destacará las similitudes y diferencias entre las propuestas presentadas. Este método permitirá identificar los puntos de convergencia, lo que facilitará la búsqueda de consensos.
Un aspecto clave de este proceso será su transparencia. Se ha habilitado una plataforma en línea donde se almacenará toda la información presentada en las sesiones, para que los participantes y la ciudadanía puedan consultarla y mantenerse informados sobre los avances de las discusiones.
La responsabilidad en manos de la Asamblea
Una vez concluidas las consultas, el presidente Mulino llevará la propuesta consensuada a la Asamblea Nacional, donde será debatida. Mon expresó su confianza en que los diputados abordarán el tema con la seriedad que requiere, ya que la crisis en el sistema de IVM y la atención médica de la CSS afecta a toda la población.
“Esperamos que la Asamblea Nacional haga cambios propositivos, no para desmejorar lo planteado, sino para mejorar”, comentó Mon, subrayando la importancia de que todos los sectores involucrados cooperen para alcanzar una solución que beneficie a los panameños.
El futuro de miles de jubilados está en juego, y el tiempo para actuar es ahora. Sin acciones urgentes, el año 2025 podría convertirse en un desafío muy difícil para el sistema de jubilaciones en Panamá.