El ministro de Comercio e Industrias de Panamá, Federico Moltó, defendió enérgicamente el nombramiento de Astrid Ábrego como viceministra de la institución, rechazando rotundamente las acusaciones de conflicto de intereses que han surgido en algunos sectores. En una reciente rueda de prensa, Moltó abordó las preocupaciones planteadas, explicando detalladamente el proceso de selección y las calificaciones que llevaron a la designación de Ábrego.
Según el ministro, la elección de Ábrego se basó exclusivamente en su destacada trayectoria profesional, su profundo conocimiento del sector comercial y su probada capacidad de gestión. Moltó destacó que Ábrego cuenta con una amplia experiencia en el ámbito público y privado, lo que la convierte en una figura idónea para asumir las responsabilidades del viceministerio. “Su experiencia y visión estratégica son invaluables para impulsar el crecimiento y la competitividad del comercio panameño”, afirmó Moltó.
Ante las preguntas de los periodistas sobre posibles conflictos de intereses derivados de la relación personal o profesional de Ábrego con empresas o individuos vinculados al sector, Moltó fue enfático al negar cualquier irregularidad. “Se han realizado todas las verificaciones necesarias para asegurar que no existe ningún conflicto de intereses que pueda comprometer la imparcialidad y transparencia de su gestión”, aseguró el ministro. Además, añadió que Ábrego se ha comprometido a inhibirse de cualquier decisión que pueda involucrar a empresas o personas con las que haya tenido vínculos previos.
Moltó también aprovechó la oportunidad para destacar los desafíos que enfrenta el Ministerio de Comercio e Industrias en el contexto actual, incluyendo la necesidad de diversificar las exportaciones, fortalecer el mercado interno y atraer inversión extranjera. En este sentido, subrayó la importancia de contar con un equipo de profesionales competentes y comprometidos, como Astrid Ábrego, para alcanzar los objetivos trazados.
El nombramiento de Ábrego se produce en un momento crucial para la economía panameña, que busca recuperarse de los impactos de la pandemia y consolidar su posición como un centro logístico y comercial de primer nivel. La gestión del Ministerio de Comercio e Industrias, bajo la dirección de Moltó y ahora con el apoyo de Ábrego, será fundamental para impulsar la reactivación económica y generar nuevas oportunidades de empleo.
La defensa del ministro Moltó del nombramiento de Ábrego busca disipar las dudas y controversias que han surgido en torno a su designación. El gobierno panameño confía en que Ábrego desempeñará sus funciones con profesionalismo y transparencia, contribuyendo al desarrollo del país. La controversia, sin embargo, pone de relieve la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión pública, así como la necesidad de evitar cualquier apariencia de conflicto de intereses que pueda erosionar la confianza de la ciudadanía en las instituciones.