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El mundo está en proceso de recuperación tras el “mayor apagón informático de la historia” causado por una actualización defectuosa de CrowdStrike, afectando a industrias clave como la bancaria, aeronáutica, medios de comunicación y el sector salud.
Usuarios y empresas de todo el mundo, desde bancos hasta hospitales, experimentaron la caída masiva de sus sistemas debido a un error en una actualización de software de CrowdStrike para Windows 10. El incidente provocó la temida «pantalla azul de la muerte» en numerosos equipos. George Kurtz, director general de CrowdStrike, aclaró en X que no se trató de un ciberataque, sino de un problema técnico aislado.
El experto en ciberseguridad Troy Hunt, fundador de HaveIBeenPwned, describió el suceso como “el mayor apagón informático de la historia”, subrayando la magnitud del impacto global. Kurtz agregó que sus ingenieros ya han solucionado el problema, pero que la recuperación completa podría tomar tiempo para algunos clientes.
Impacto en la Aviación Global
El sector más afectado fue el transporte aéreo, con más de 31,000 vuelos retrasados y 3,600 cancelados en Estados Unidos. Aeropuertos importantes como Heathrow en Londres y Schiphol en Ámsterdam implementaron planes de contingencia para mitigar el impacto. Jaime Díaz, experto en aviación, señaló que “la rápida respuesta de los aeropuertos ayudó a minimizar el caos”.
En Latinoamérica, la afectación fue menor. Aerolíneas en países como Panamá, Argentina y Chile reportaron normalidad en sus operaciones, mientras que en Estados Unidos y Canadá se experimentaron mayores inconvenientes, especialmente en aviación y salud.
Otros Sectores Afectados
El apagón también golpeó a bancos, hospitales y cadenas de supermercados. En Australia, bancos como NAB y ANZ enfrentaron interrupciones en sus sistemas de pago. En Japón, el sistema ferroviario y las cajas registradoras de diversos negocios se vieron afectados. En Israel, varios hospitales enfrentaron problemas técnicos.
Este incidente destaca la vulnerabilidad de nuestra infraestructura digital global. Es crucial que las empresas y los gobiernos inviertan en sistemas más resilientes y en protocolos de respuesta rápida para evitar futuros apagones. La cooperación internacional y la actualización constante de los sistemas de seguridad son fundamentales para proteger los servicios esenciales en una era digital cada vez más interconectada.
