Cerca de 400 efectivos de servicios de emergencias ucranianos trabajan incansablemente en el hospital infantil Ojmatdit de Kiev y otros lugares afectados por el ataque con misiles que Rusia lanzó este lunes, informó el presidente Volodimir Zelenski. La oleada de bombardeos ha dejado un saldo de 38 muertos y 190 heridos, mientras la comunidad internacional condena el ataque.
Este martes, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, informó que cerca de 400 efectivos de servicios de emergencias ucranianos continúan las labores de rescate en el hospital infantil Ojmatdit de Kiev y otros lugares afectados por el ataque con misiles lanzado por Rusia el lunes 8 de julio. Los bombardeos rusos no solo alcanzaron el pediátrico, sino también otro hospital, lo que ha provocado una fuerte condena internacional justo antes de la cumbre de la OTAN.
«En los lugares donde impactaron los misiles los trabajos de emergencias y rescate no han parado en toda la noche», escribió Zelenski en sus redes sociales. El ataque ha dejado un saldo de 38 muertos, 27 de ellos en la capital ucraniana, y 190 heridos, de los cuales 64 están hospitalizados en Kiev y 28 en Krivi Rig, la ciudad industrial de Dnipropetrovsk.
Desde la invasión rusa en febrero de 2022, las instalaciones sanitarias de Ucrania han sufrido 1,884 ataques, resultando en 150 muertos y 379 heridos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un 40% de estos ataques han afectado a servicios de atención primaria, dificultando el acceso de la población a los servicios básicos de salud.
El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, negó que el ataque haya tenido como objetivo instalaciones civiles y atribuyó la destrucción al impacto de un misil antiaéreo ucraniano. «No atacamos objetivos civiles, los ataques se efectúan contra instalaciones de infraestructura crítica, contra objetivos militares relacionados con el potencial militar del régimen de Kiev», afirmó Peskov.
Zelenski aseguró que su administración sigue trabajando para reforzar la protección de las ciudades ucranianas. «Habrá decisiones. El mundo tiene la fuerza necesaria para ello», declaró el presidente, quien participará en una cumbre de la OTAN en Washington. Ucrania espera obtener nuevas decisiones de sus aliados para mejorar su defensa contra los ataques aéreos rusos.
La devastación causada por estos bombardeos subraya la urgencia de una mayor cooperación internacional para proteger a la población civil y asegurar que se haga justicia. Es crucial que la comunidad global responda de manera contundente, no solo con condenas, sino también con acciones concretas que ayuden a poner fin a esta tragedia. La próxima cumbre de la OTAN será un momento decisivo para fortalecer las defensas de Ucrania y enviar un mensaje claro sobre la intolerancia a la agresión.