La organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) anunció que ha sido forzada a abandonar Rusia, poniendo fin a más de tres décadas de trabajo humanitario en el país. La decisión fue precipitada por una carta del Ministerio de Justicia ruso, recibida en agosto de 2024, en la que se informó a la organización que había sido eliminada del registro de ONG extranjeras, lo que imposibilita su operación dentro del territorio ruso.
Consecuencias de la ofensiva en Ucrania
La salida de MSF de Rusia no es un hecho aislado. Otras organizaciones humanitarias y ambientalistas occidentales, como el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y Greenpeace, también han sido declaradas «indeseables» por las autoridades rusas desde el inicio de la ofensiva en Ucrania. Estas designaciones han limitado la capacidad de las ONG de actuar en Rusia, al restringir sus actividades y bloquear su presencia en el país.
Impacto en la asistencia humanitaria
Médicos Sin Fronteras desempeñó un papel crucial en Rusia desde que inició sus operaciones en 1992. La organización brindó apoyo médico en emergencias sanitarias, epidemias, y proporcionó atención a las comunidades más vulnerables. La salida de MSF, junto con la de otras ONG, podría tener graves consecuencias para las personas que dependían de sus servicios, particularmente en momentos de crisis humanitaria.
En su comunicado, MSF expresó su preocupación por el cierre de este capítulo de su labor, que podría dejar desatendidas a muchas personas que enfrentan dificultades médicas y humanitarias. Aunque la organización aún opera en otros países de la región, la salida de Rusia marca el fin de una era en su compromiso humanitario en la zona.
Contexto político y humanitario
La decisión del gobierno ruso de prohibir la operación de estas organizaciones se enmarca en un contexto de creciente tensión política y militar, particularmente desde el inicio de la guerra en Ucrania. El endurecimiento de las políticas internas ha afectado a varias organizaciones internacionales, quienes enfrentan ahora un panorama cada vez más hostil en el país.