Los líderes europeos reunidos este jueves en París enviaron un mensaje contundente a Rusia: las sanciones no solo continuarán, sino que se intensificarán hasta que Moscú ponga fin a la invasión de Ucrania. La cumbre, convocada por el presidente francés Emmanuel Macron, reunió a representantes de 31 países comprometidos con el apoyo a Ucrania.
Un mensaje unánime de firmeza
El primer ministro británico Keir Starmer fue tajante: «Quedó totalmente claro que ahora no es el momento de levantar las sanciones, todo lo contrario; lo que discutimos es cómo podemos aumentarlas». El canciller alemán Olaf Scholz reforzó este mensaje, advirtiendo que «abandonar las sanciones sería un grave error» antes de alcanzar la paz.
Zelensky: Rusia no busca la paz
El presidente ucraniano Volodimir Zelensky destacó que «todos entendieron y comprenden que hoy Rusia no quiere ningún tipo de paz». A pesar de las conversaciones diplomáticas, los ataques rusos continúan, con un reciente bombardeo con drones que dejó más de 20 personas heridas.
Estrategias y próximos pasos
Los líderes discutieron planes para:
- Mantener el apoyo militar y económico a Ucrania
- Desarrollar garantías de seguridad
- Preparar una estrategia de reconstrucción post-conflicto
Starmer se mostró «decidido» a lograr la «paz mediante la fuerza» y aseguró a Zelensky que Ucrania contará con «todo nuestro apoyo mientras sea necesario».
Participantes clave
La cumbre contó con representantes de:
- 27 países europeos
- Altos funcionarios de la OTAN y la UE
- Representantes de Canadá y Australia
- Delegación de Turquía
Condiciones para el alto el fuego
Rusia había solicitado como condición para un alto el fuego en el mar Negro la reconexión de un banco agrícola al sistema SWIFT, propuesta que tanto Ucrania como la Unión Europea han rechazado categóricamente.
El conflicto continúa sin visos de resolución inmediata, con ambas partes acusándose mutuamente de incumplir potenciales acuerdos.