Crisis respiratoria del papa Francisco: médicos evalúan las consecuencias en las próximas 24 horas

Redacción PNN 28/02/2025

El papa Francisco sufrió esta tarde una «crisis aislada de broncoespasmo» que provocó un episodio de vómito y un «repentino empeoramiento del cuadro respiratorio», según informó el Vaticano. Este incidente ocurre cuando el pontífice de 88 años parecía mostrar signos de mejoría tras dos semanas hospitalizado.

Respuesta médica inmediata

Tras el episodio, el Papa fue sometido «de inmediato a una broncoaspiración» e iniciaron ventilación mecánica no invasiva, con «buena respuesta en los intercambios gaseosos», de acuerdo con el comunicado oficial. Fuentes vaticanas confirman que el pontífice continúa necesitando esta ventilación para mantener sus niveles de oxígeno, aunque no está entubado.

Las autoridades del Vaticano señalan que Francisco ha permanecido «orientado y consciente, colaborando con las maniobras terapéuticas» durante todo el proceso.

Periodo crítico de observación

Los médicos han indicado que «se necesitarán al menos 24 horas para entender qué consecuencias tendrá esta crisis», que insisten ha sido «aislada». Esta situación parece explicar por qué los especialistas se refieren al estado de salud del Papa como un «cuadro complejo», manteniendo un pronóstico reservado.

¿Qué es un broncoespasmo?

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos (MedlinePlus), un broncoespasmo es una contracción anómala de los músculos que rodean los bronquios, provocando un estrechamiento de las vías respiratorias que dificulta la entrada y salida de aire en los pulmones.

Dos semanas de hospitalización

El Papa cumple dos semanas ingresado en el hospital Gemelli de Roma por una bronquitis con infección polimicrobiana, complicada con una neumonía bilateral y una insuficiencia renal que encendió las alarmas sobre su estado de salud.

Aunque en los últimos días se había informado de cierta estabilidad en su condición, los médicos han mantenido la cautela, ya que aún no consideraban que Francisco estuviera completamente fuera de peligro, una precaución que parece justificada tras este reciente episodio respiratorio.

Las próximas horas serán determinantes para evaluar el impacto de esta crisis en la recuperación del pontífice.