El Presidente José Raúl Mulino salió al paso de lo que consideró «Novedosas Fórmulas» para seguir drenando el Estado.
Por medio de su cuenta en la red social X Mulino señaló:
Por tanto, ha solicitado formalmente a la Contraloría General de la República que no apruebe la liquidación en trámite para el gerente general de la Empresa de Transmisión Eléctrica, S.A. (Etesa), Carlos Mosquera Castillo. La liquidación, que asciende a 250 mil dólares, ha generado controversia y llamado la atención sobre las prácticas de remuneración de altos funcionarios en el país.
En un comunicado, Mulino destacó que los cargos con periodos de cinco años, especialmente aquellos de libre remoción o que son considerados de confianza, concluyen su mandato el 30 de junio. “Los cargos por periodo de 5 años, sobretodo los de libre remoción o funcionarios de confianza, terminan el 30 junio”, afirmó el presidente electo.
Mulino también fue enfático al señalar que no se permitirá el uso de “novedosas” fórmulas para terminar estos cargos mediante acuerdos mutuos que, según él, constituyen un abuso contra los fondos públicos. “No se va a permitir ‘novedosas’ maneras de terminar tales cargos a través de fórmulas de mutuos acuerdos que no representan otra cosa que un abuso contra los fondos de la Nación”, añadió.
Contexto y Reacciones
La solicitud de Mulino ha generado una serie de reacciones en el ámbito político y social del país. Muchos ciudadanos y expertos en finanzas públicas han expresado su apoyo a la medida, considerando que es una acción necesaria para proteger los recursos del Estado. Por otro lado, algunos críticos argumentan que los acuerdos de mutuo consentimiento pueden ser una herramienta válida en ciertas circunstancias y que cada caso debe ser evaluado de manera individual.
Carlos Mosquera Castillo, gerente general de Etesa, ha sido una figura destacada en el sector energético de Panamá. Su gestión ha sido objeto de debate, con opiniones divididas sobre su desempeño y la justificación de su liquidación.
La Contraloría General de la República, bajo la dirección de Gerardo Solís, ahora enfrenta la decisión de aprobar o rechazar la solicitud de liquidación. Esta decisión tendrá implicaciones significativas no solo para Etesa, sino también para la percepción pública de la gestión de fondos estatales.
La administración de José Raúl Mulino, que está próxima a iniciar, ya ha dejado clara su postura respecto al manejo de los fondos públicos y la rendición de cuentas de los funcionarios de alto nivel. Esta acción se alinea con su promesa de una gestión más transparente y responsable.