Ecuador celebró elecciones presidenciales anticipadas para elegir al sucesor de Guillermo Lasso, marcadas por una crisis de seguridad sin precedentes. Daniel Noboa, un empresario de 35 años e hijo del cinco veces aspirante Álvaro Noboa, lidera el conteo con más de cuatro puntos de ventaja sobre su contrincante Luisa González, la candidata apoyada por el exmandatario Rafael Correa.
Noboa obtuvo el 52% de los votos, lo que lo convierte en el presidente más joven de la historia de Ecuador. Su victoria pone fin a las aspiraciones de González de convertirse en la primera mujer en ocupar el Palacio de Carondelet, la sede del Gobierno en Quito. El correísmo se quedó cerca de regresar al poder, pero no logró ganar las segundas elecciones presidenciales consecutivas.
Estas elecciones se convocaron para elegir al sucesor de Guillermo Lasso y completar su período, después de que aplicó la «muerte cruzada» en mayo, lo que le permitió disolver la Asamblea Nacional y adelantar el proceso electoral. El ganador de esta segunda vuelta gobernará hasta mayo de 2025.
Lasso ha invitado al presidente electo a coordinar una transición inmediata, y se espera recibirlo en Carondelet tan pronto como el martes.
La elección de Noboa representa un cambio en el panorama político de Ecuador y plantea nuevos desafíos y oportunidades para el país.