Cientos de trabajadores de Disneylandia se manifestaron en Anaheim, California, exigiendo mejores salarios y denunciando prácticas intimidatorias por parte de la empresa. La plantilla, representada por varios sindicatos, decidirá este viernes si autoriza una huelga en el famoso parque temático.
Vestidos como los icónicos personajes de Disney, los manifestantes mostraron su descontento a las puertas de Disneylandia, portando carteles con mensajes como «Mickey querría un sueldo justo» y «Disney, no sea el villano». La protesta, organizada por los sindicatos que representan a los 14,000 empleados del parque, subraya la creciente tensión entre la plantilla y la empresa.
«Merecemos salarios justos», expresó Ginny Cristales, una empleada de 44 años, durante la manifestación en Anaheim, cerca de Los Ángeles. Cristales, quien gana 2,800 dólares mensuales, explicó que su salario no le permite cubrir el alquiler de su familia. «Una huelga es nuestro último recurso, que no queremos. Pero si Disney no cumple y nos da lo que necesitamos, entonces estamos listos», añadió.
Desde abril, Disney ha estado en negociaciones con los cuatro sindicatos que representan a su plantilla en California. Sin embargo, estas conversaciones no han producido resultados, y los sindicatos acusan a la empresa de intimidar a sus empleados. El viernes, los trabajadores se reunirán para decidir si autorizan una huelga. En caso afirmativo, los sindicatos determinarán la duración y condiciones de la misma.
El diario LA Times informó que la última huelga de los trabajadores de Disneylandia en California ocurrió en 1984. La decisión de los empleados esta semana podría marcar un momento histórico para el parque temático y reflejar una creciente insatisfacción laboral en un sector que busca mejores condiciones y compensaciones.
La situación en Disneylandia pone de manifiesto un conflicto laboral que resuena con trabajadores de diversas industrias que luchan por condiciones más justas.