En esta época de cambios que vivimos los panameños, he entrado a una profunda reflexión sobre el legado de aquel noble jurista y excelso ciudadano panameño, Ramón Fonseca Mora.
Luego de conocer el fallo sobre el caso «Panamá Papers», nombre infortunado y mediático brindado por los enemigos de la economía de servicios nacional, los poderes malignos que conspiran contra Panamá, considero que para -verdaderamente- hacer justicia a la memoria de tan honorable ser humano, hay que emprender una lucha colectiva contra ese aparato burocrático construido a partir de las mentiras que divulgaron desde los centros del poder mediático y a la que se prestaron malos panameños.
Para mí, allí radica el legado de Fonseca Mora. Siempre estuvimos orgullosos de nuestra plataforma de servicios y si queremos preservarla debemos llenarnos de valentía y enfrentar a aquellos que buscan desaparecer a esta gran nación tendida sobre un istmo.