Representantes de las 62 empresas generadoras de energía que operan en Panamá se reunieron este miércoles con Rodrigo Rodríguez, el nuevo secretario Nacional de Energía, para discutir los planes de la administración de José Raúl Mulino para el sector energético. El encuentro, que tuvo lugar en el Palacio de Las Garzas, marcó el inicio de la definición de estrategias para promover inversiones sostenibles en el sector. Juan Carlos Orillac, ministro de la Presidencia, representó al presidente Mulino en la reunión.
Una de las prioridades clave del gobierno de Mulino, presentada a las empresas generadoras, es la interconexión eléctrica con Colombia. Este proyecto se considera fundamental para modernizar, expandir y optimizar la red eléctrica nacional. El ministro Orillac destacó la necesidad urgente de inversiones en todos los aspectos de la generación de energía para satisfacer la creciente demanda del país.
Durante la conversación, el secretario de Energía y los representantes de las generadoras abordaron diversas áreas cruciales para el futuro del sector. Se discutieron posibles inversiones, la agilización de los procesos regulatorios, los planes de licitaciones futuras y la diversificación de las fuentes de generación de energía. El objetivo es asegurar un suministro de energía confiable, sostenible y asequible para todos los panameños.
Panamá cuenta actualmente con 110 plantas generadoras de energía, operadas por las 62 empresas participantes en la reunión. Según datos de agosto de 2024, la capacidad instalada total es de 4,105 megavatios, y la generación eléctrica neta acumulada alcanza los 8,587 gigavatios. La matriz energética del país se compone principalmente de energía hidráulica (45%), seguida por el gas (17.2%), búnker (13.1%), solar (12.1%) y eólica (8.2%).
La administración Mulino busca fortalecer y diversificar esta matriz, promoviendo la inversión en energías renovables y la modernización de la infraestructura existente. La interconexión con Colombia es vista como un paso importante para lograr estos objetivos, ya que permitirá un intercambio de energía más eficiente y confiable entre ambos países.
Esta reunión representa un primer paso crucial en la colaboración entre el gobierno y el sector privado para impulsar el desarrollo energético de Panamá. Se espera que las discusiones continúen en los próximos meses, con el objetivo de establecer una hoja de ruta clara para las inversiones y la modernización del sector. El gobierno de Mulino ha manifestado su compromiso de crear un entorno favorable para la inversión, agilizando los procesos regulatorios y promoviendo la transparencia en las licitaciones. Esto, a su vez, contribuirá a garantizar un suministro de energía seguro, sostenible y asequible para el crecimiento económico y el bienestar de la población panameña.