La Unión Europea (UE) ha decidido transferir 1,500 millones de euros de los fondos rusos congelados a Ucrania, anunció la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Esta medida busca apoyar la defensa y reconstrucción del país tras la invasión rusa.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció que la UE transferirá 1,500 millones de euros de los activos rusos congelados a Ucrania. Esta decisión es parte de un esfuerzo más amplio del G7 y la UE para utilizar los intereses obtenidos de los fondos rusos congelados en apoyo a un préstamo de 50,000 millones de dólares para Ucrania.
En un mensaje publicado en la red social X, von der Leyen expresó: «Hoy transferimos 1,500 millones de euros de los fondos rusos inmovilizados a la defensa y reconstrucción de Ucrania. No hay mejor símbolo o uso para el dinero del Kremlin que hacer de Ucrania y de toda Europa un lugar más seguro para vivir».
Por su parte, el primer ministro ucraniano, Denis Shmyhal, agradeció el apoyo: «Gracias Von der Leyen y UE por su firme apoyo y esta importante contribución a la defensa y reconstrucción de Ucrania. Juntos estamos convirtiendo la adversidad en fortaleza y construyendo una Europa más segura y resistente».
Contexto y Reacciones
Desde la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022, los países occidentales han bloqueado alrededor de 300,000 millones de dólares en activos rusos. El G7 y la UE acordaron recientemente utilizar los intereses generados por estos fondos para apoyar la defensa ucraniana.
El Kremlin ha prometido emprender acciones legales contra esta medida. Mientras tanto, los Estados miembros de la UE continúan discutiendo la extensión del período de renovación de las sanciones sobre los activos del banco central ruso para asegurar el préstamo del G7 a Ucrania.
Reflexión Final
La transferencia de estos fondos es un paso significativo en el apoyo a Ucrania en su lucha por la defensa y la reconstrucción. Esta acción subraya el compromiso de la UE y el G7 en fortalecer la seguridad y la estabilidad en Europa, convirtiendo los recursos inmovilizados en herramientas para el bien común.