Los mercados financieros reaccionaron con preocupación ante el anuncio del presidente Donald Trump de implementar una nueva ronda de aranceles que afectaría a socios comerciales clave, incluyendo la Unión Europea, China, Canadá y México. La medida podría tener importantes consecuencias para la economía estadounidense y global.
Impacto inmediato y reacciones
El anuncio provocó una caída inmediata en el índice S&P 500, mientras los inversores evaluaban las posibles consecuencias de estas medidas proteccionistas. Los aranceles propuestos incluyen gravámenes sobre una amplia gama de productos:
- Chips de computadora
- Acero
- Petróleo y gas natural
- Cobre
- Medicamentos
- Diversas importaciones de la UE
Los líderes internacionales ya han comenzado a responder. El primer ministro canadiense Justin Trudeau advirtió sobre posibles represalias y anunció un plan de 1.300 millones de dólares canadienses para abordar las preocupaciones de seguridad fronteriza. Por su parte, la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum aseguró que su país cuenta con múltiples planes de contingencia.
Riesgos económicos
Los expertos advierten que esta nueva política arancelaria podría tener consecuencias significativas:
«Serían un enorme choque, una medida mucho más grande que todas las medidas comerciales que Trump aplicó en su primer mandato», señaló Brad Setser, investigador del Consejo de Relaciones Exteriores.
La propuesta genera especial preocupación en un momento en que las expectativas de inflación ya están aumentando. Según el índice de percepción del consumidor de la Universidad de Michigan, se espera que los precios suban un 3,3%, superando la tasa actual de inflación del 2,9%.
Perspectiva política
Trump defiende su estrategia comparándola con las políticas del presidente William McKinley de la década de 1890, a quien llama el «sheriff de los aranceles». Sin embargo, los demócratas en el Congreso están promoviendo legislación para limitar la capacidad presidencial de imponer aranceles sin aprobación legislativa.
El senador Chris Coons advirtió que estos aranceles «causarán un daño catastrófico a nuestras relaciones con nuestros aliados y aumentarán en cientos de dólares al año los costos para las familias trabajadoras».
La implementación de estas medidas representa una importante apuesta política para Trump, quien deberá demostrar que puede mantener su promesa de controlar la inflación mientras implementa políticas proteccionistas de gran alcance.