Reino Unido y China reanudan diálogo económico tras 6 años de pausa

admin 11/01/2025

La ministra de Economía británica, Rachel Reeves, realizó una visita histórica a China este sábado 11 de enero de 2025, marcando la reanudación del Diálogo Económico y Financiero entre ambas naciones tras un paréntesis de seis años. Este encuentro diplomático busca restablecer los lazos económicos entre el Reino Unido y la segunda economía más grande del mundo, en un momento crucial para ambos países.

Objetivos y acuerdos alcanzados

Reeves, acompañada por una delegación de ejecutivos empresariales y funcionarios financieros británicos, se reunió con altos funcionarios chinos, incluyendo al viceprimer ministro He Lifeng. Durante las conversaciones, se lograron acuerdos en áreas financieras por un valor estimado de 600 millones de libras esterlinas (aproximadamente 732 millones de dólares) para los próximos cinco años.

La ministra británica enfatizó la necesidad de una relación «estable y pragmática» entre ambos países, destacando la importancia de colaborar en áreas de interés mutuo mientras se mantiene la franqueza en temas de desacuerdo.

Contexto y desafíos

Este acercamiento se produce en un momento delicado para las relaciones bilaterales, marcadas por:

Acusaciones mutuas de espionaje
El apoyo de China a Rusia en el conflicto de Ucrania
Preocupaciones sobre las libertades civiles en Hong Kong

Además, la visita de Reeves coincide con una situación económica complicada en el Reino Unido, caracterizada por altos costos de endeudamiento y una libra esterlina debilitada.

Perspectivas futuras

A pesar de las críticas de la oposición, que acusa a Reeves de «huir a China» en lugar de abordar los problemas económicos internos, la ministra defiende que este diálogo es crucial para el crecimiento económico británico. El gobierno laborista busca un enfoque pragmático en las relaciones con Beijing, equilibrando las oportunidades económicas con las preocupaciones sobre seguridad nacional y derechos humanos.

La reanudación de este diálogo económico podría marcar un nuevo capítulo en las relaciones sino-británicas, con potenciales beneficios para ambas partes, pero también con desafíos significativos por superar.